Playa Este

-Lo se, y se que tu sabes también que es necesario.

*Contesté con los ojos cerrados y respirando calmada y profundamente, intentando suplir la sensación de falta de aire en los pulmones, aunque era mas bien un reflejo involuntario pues yo ya sabía que ni por mucho que me esforzara en respirar adecuadamente, ni por mucho que quisiera permanecer consciente, la hora de mi muerte llegaría si o si sin ni un solo segundo de retraso.
El hombre que nos cuidaba mantuvo silencio durante un rato, mirandonos a Aerith y a mi alternadamente antes de atreverse a hablar.*

-Usted es su aprendiz?

*Preguntó de pronto dirigiéndose a Aerith.*

-Si, lo es. *Contesté en su lugar apresuradamente y sin abrir mis ojos, para que no fuera a creer que yo me había dormido ya o que no estaba consciente de la situación.*

-Oh... ya veo.

*Y acabé por estar en lo cierto. Al fin y al cabo él solo quería conversar con la mujer porque creía que yo no estaba escuchando, pero al ver que yo continuaba aquí desistió de sus intentos y se entretuvo atizando la fogata con un palo.*

-Si, lo sabes todo

*Dije con cierto aire de broma, sabia que no era cierto pero el siempre creia que si al parecer era feliz creyendolo, levante la mirada dejando a Adriel para que descansara y me encontre con el hombre que se habia quedado, le sonrei levemente en agradecimiento, pero luego el pregunto y Adriel le contesto antes de que pudiera articular la respuesta, frunci el ceño y lo mire con los ojos entrecerrados*

-Gracias, pero puedo contestar yo sola

*Le dije con cierto sarcasmo, pero resignada a que hiciera lo que quisiera aunque yo pudiera tambien hacerlo, mas cuando lo dejaba intervenir en ese estado*

-Eso también lo se.

*Murmuré quedandome quieto. Ya no intervendría, pero que supieran los dos que yo estaba allí, así que no se les ocurriera hacer o decir nada inapropiado.
Si él se le acercaba a Aerith lo atravezaría con el mismo palo con que atizaba las brazas.*

-Eres un tonto

*Reclame mirandole de reojo y dejandole en paz, me dolia la herida y senti la tentacion de acercarme al mar pero no queria arriesgarme a que tanto Adriel como el pitara se diera cuenta de lo que realmente pasaba conmigo.
Di un suspiro relajada y mire al niño que se mantenia bajo el abrigo que habia dejado el otro medico, al menos el estaba descansando bastante bien*

*Me quedé en silencio, pero el hombre comenzó a murmurar una melodía mientras miraba la fogata y de pronto se puso de pie.*

-Iré a dar una vuelta para vigilar los al rededores. Si ocurre algo malo solo debe gritar mi nombre y vendré de inmediato.
Soy Morgan, por cierto.

*Lo escuché con claridad a pesar de tener los ojos cerrados. Parecía un hombre diligente aunque no confiaba en nadie mi seguridad y la de mis empleados, esta vez no me cabía de otra. No tenía más opción que confiar en ese desconocido nuestra seguridad, mientras mi cuerpo continuó debilitándose tanto que en solo unos minutos ya no pude mantenerme sentado con mi propia fuerza y me recosté sobre la arena fría, de costado, con la mejilla contra mi brazo, mirando hacia la fogata cuyo calor irradiaba en mi rostro.*

-Ya casi es hora... *Murmuré por si Aerith aún podía oírme.*

-No te esfuerces demasiado... no hagas nada estúpido... mientras no puedo vigilarte. Cuida de tu herida... que no se vaya... a infectar....

*Mi voz era como un susurro a esas alturas no podía esforzarme mucho más que eso para elevar el volumen de mis palabras.*

*Estaba atenta a Adriel y al pequeño que descansaba no muy lejos de nosotros, pero escuche al chico que se había quedado a cuidarnos y levante la mirada sonriendole agradecida de que hiciera eso para ayudarnos*

-Mucho gusto Morgan, yo soy Aerith, gracias y ve con cuidado

*Me presente por costumbre y le desee lo mejor mientras realizaba la guardia, me voltee a Adriel al escucharlo, creia que iba a poder soportarlo hasta subir al barco pero parecia que no, di un suspiro y me incline un poco mas hacia el para poder escucharle mejor.*

-Deberias relajarte un poco, yo cuidare de ti mientras estes dormido, pero veras que estare bien cuando despiertes

*Murmure divertida, siempre me decia esas cosas pero nunca nada salia como ambos esperabamos*

*Dormía cuando de pronto me dio un escalofrio por el viento que se levantó de pronto y abrí los ojos para darme cuenta de que aún estaba oscuro, y aún la fogata encendida era la única lumbrera cercana.
La mujer con la que nos habiamos encontrado antes estaba con aquel hombre dormido sobre sus piernas y me incorporé, fregandome logeramente los ojos para buscar a Henry al rededor.*

-Y mi hermano?

*Pregunté ingenuamente, sin saber lo que había ocurriido desde que me había dormido.
Tampoco veía a Monique, o a Marko ni a nnguno de los tripulantes del barco*

*Al menos Adriel se habia quedado tranquilo y esperaba que asi siguiera pues no podia hacer nada en realidad para ayudarlo. Pensaba como iba a mantenerlo muerto cuando escuche la voz del niño y voltee a verle curiosa*

-Tu hermano junto al resto de los hombres han ido hacia el barco

*LE conteste al niño antes de señalarle la direccion en la que habian desaparecido, seguramente ya para estas horas estaban en el barco y esperaba que no tardaran aun mas en volver por nosotros*

*Inmediatamente miré en la dirección en que apuntaba su mano y me sobrecogí al ver que solo era la más absoluta oscuridad.*

-Se fue?... *La miré de nuevo y al hombre que estaba recostado sobre sus piernas, que estaba pálido como si hubiera muerto y me dio miedo estar allí.*

-Y volverá, verdad? *Pregunté angustiado*

-Dijeron que iban por el barco, mientras descansabas

*Le explique para que no se fuera a creer que le abandonaron en este lugar, ademas dudaba que algo asi pasara si su hermano era el capitan*

-Claro que si, solo que dijeron que esperaramos, porque tu estabas dormido y pues nosostros heridos

*Le conteste rápidamente, dandole una leve explicacion de lo habian pensado, ademas tenia que calmarlo*

-Y los malos? Mi hermano está luchando con ellos, no es así? *Me acerqué a ella gateando sobre la arena con el abrigo sobre los hombros y observé al hombre estando arrodillado a su lado, pero por ningún motivo lo toqué*

-Él se va a morir?

*De pronto el sonido de un disparo resonó en el aire y luego otro y otro más... venían de la oscuridad más allá de la playa y supe entonces que era mi hermano que estaba luchando con los malos que quedaban en el barco.
Me puse de pie con un salto y me arropé con el abrigo, cerrándolo sobre mi pecho con mis manos empuñadas y mirando hacia aquel vacío oscuro.*

-Henry... *Murmuré y largué a correr hacia la orilla, aunque sabía que no iba a poder ir más allá de donde me dejara ir el agua.*

-Supongo que si, no puedo asegurarlo estando aqui

*Le conteste sonriendole levemente, iba a levantar mi mano para hacerle algun cariño y que se relajara, pero cuando pregunto por Adriel, voltee a verle y di un suspiro*

-Esta grave, pero espero que sobreviva

*Le dije volteando a verlo de nuevo, pero en eso se escucharon los disparos de la pelea y mire en la misma direccion que el niño*

-Oye espera!

*Me apresure a decir y quise alcanzarlo, pero ya se habia ido a la orilla de la playa*

*Como pensé, no pude ir más allá de la orilla de la playa donde acabé mojandome los pies en el mar. Miraba fijamente a la oscuridad por si era remotamente posible ver algo en esa muralla negra que lo cubría todo, pero apenas podía ver a esa distancia los destellos que supuse serían de los disparos e incluso para ello debía forzar mucho mi vista.
Estaba concentrado cuando de pronto sentí que alguien me tomaba el hombro por detrás y me volví a ver a un hombre que reconocía como parte de la tripulación.*

-Joven Jared, es peligroso que esté usted aquí solo. Volvamos junto a la fogata y no vaya a ser que acabe enfermo.

*Era amable y no trató de asustarme, de modo que confié en él y regresé junto a la fogata.
En efecto, estaba temblando de frío y tenía los pies mojados de modo que cuando llegamos junto a la fogata me senté cerca con los pies hacia el fuego.*

-Mi hermano está peleando... igual que mis amigos.

*Comenté encogiendome sobre mi mismo. Me preocupaba que los lastimaran y quería que volvieran pronto.*

*Me sonrei levemente cuando el joven fue a por el niño, que al menos asi no tenia que preocuparme y dejar a Adriel, que cada minuto estaba mas cerca de la muerte.
Di un suspiro cansada, me empezaba a doler la herida pero queria estar al pendiente por si iba a tener que rogar para llevar a Adriel hasta tortuga y que alla pudiera revivir y seguir nosotros con lo de siempre*

-Se ve que es un hombre fuerte y valiente, seguro regresaran bien

*Dije para darle animo al niño, pasando mis mano por su frente para limpiar el sudor frio que lo empezaba a cubrir*

*Asentí levemente mirando la fogata y cuando mis pies se me calentaron recogí las rodillas y las abracé para quedarme mirando la fogata.
La situación era muy peligrosa tanto para ellos como para nosotros.
Si, Henry era fuerte, pero Marko me dijo que estaba lastimado y no podría luchar bien con sus heridas que tenía. Monique también era fuerte, pero nosotros eramos pocos y ellos muchos, y aún cuando ganaran la pelea, nada aseguraba que no fueran a resultar más heridos.
Yo ya no quería perder a mis amigos. No quería que les pasara como a Luan.
Escondí la cabeza entre mis brazos, apoyando la frente sobre mis rodillas.
Tampoco nosotros estabamos a salvo aquí a menos que ellos regresaran a por nosotros.
Y si no volvían? Y si perdían y nos quedabamos aquí para siempre?
La angustia se apoderó de mi entonces y no pude menos que comenzar a sollozar, despacito y silencioso.*

*Al menos el niño se había quedado tranquilo por ahora junto a la fogata, eso hacia que todo fuera mas silencioso, miraba a Adriel esperando solo que volvieran para llevarlo al barco, pero no había conseguido nada que me sirviera para mantener a Adriel en ese estado de muerte.
Di un suspiro con pesar porque era seguro que tendria que indagar en barco para encontrar alguna cosa util. Sin embargo sali de mi pensamiento al escuchar los sollozos del niño que aparte del chisporroteo de la fogata eran mas claros en el silencio, asi que voltee a verle preocupada*

-Pequeño

*Le llame al principio pues no sabia como se llamaba y esperaba que al menos asi supiera que le hablaba a el*

-Mi nombre es Aerith, cual es el tuyo?

*Le pregunte manteniendo mi mirada en el, suponia que estaba preocupado y si no se distraia seria mas pesado para el*

*Me cubri la cabeza con el abrigo para esconderme y solo levanté la vista cuando escuché que la mujer me hablaba.
Entonces me descubrí, enjugué mis lágrimas con la manga de mi camisa y me sorbí los mocos.*

-Jared... *Contesté con la voz compungida como si el llanto interno no quisiera irse.
Henry siempre decía que no tenía que decirle nuestros nombres a la gente, pero esta mujer, al igual que me lo había parecido Tetra, no parecía una persona mala. Aunque el hombre moribundo sobre sus piernas sí lo parecía, pero por fortuna no estaba despierto.*

-Jared Gain.

*Me volví a sorber los mocos y me limpié la nariz con mi manga de nuevo, esperando que con ello quedara con el rostro limpio*

-Un gusto Jared

*Dije amablemente sonriendole*

-Dime jared te gustan los animales

*Pregunte para hacerle plática y que no se empezara a preocupar de mas a fin de cuentas debía tener esperanza para que saliéramos de esa isla*

*La miré de reojo y asentí levemente con la cabeza.
Pero qué tenian que ver los animales con la situación que estabamos pasando ahora?*

-Tengo un ratoncito que se llama Larry... Mi hermano dice que no es bueno acariciar ratones, pero Larry es muy limpio y no tiene piojos.

*Le expliqué mirando el fuego*

-Yo tiene mucho que no tengo una mascota

*Desde que había perdido a las animales que se quedaban en mi casa no había vuelto a cuidar a ninguno, ya que Adriel decía que no era correcto si queríamos evitar que las personas empeoraran por alguna infección o cosas así, la verdad era que lo creía estúpido, pero era el que terminaba dando las ordenes y yo solo obedecía*

-Que mas te gusta Jared?

*Pregunte curiosa, quizá con algo que dijera podía sacarle un poco mas de platica que solo preguntarle*

*miré a la mujer de reojo.
A ella le gustaban acaso los animales? Tal vez... pero dijo que no tenía mascotas, así que lo dudaba.
Henry me decía siempre que se puede siempre confiar en una persona en la que los animales confían, porque ellos sienten la honestidad de los seres humanos por instinto. Entonces me lamenté de no tener conmigo a Larry pues hubiera hecho la prueba con él.
Aún con mis dudas me daban ganas de levantarme e ir con ella, pero me aterraba la idea de que el hombre en sus faldas despertara y me hiciera algo... yo que se. Parecía no ser muy simpático y además su cara de muerto me asustaba mucho. De modo que me quedé sentado donde estaba y volví a mirar el fuego.*

-Pues... me gusta viajar y conocer lugares nuevos junto con mi hermano.
También me gusta el mar. Y me gusta jugar con mis amigos.

*Me le quede mirando mientras esperaba que me contestara y en cuanto lo hizo me senti aliviada de que me siguiera la platica aunque no me conociera.*

-Debes de conocer muchos lugares bonitos, verdad?

*Yo apenas conocia Dominica porque era a lo mas lejos que habia ido con el Medico, de ahi en mas todo me era desconocido*

-O sea te gusta nadar o viajar sobre el en el barco?

*Asentí con la cabeza. Si conocía muchos lugares bonitos, sin embargo eran bonitos solo porque Henry siempre me mostraba las cosas por su lado bueno. Muchas de las playas que conocía se parecían a esta, pero esta vez me parecía como el lugar más feo que hubiera visitado jamás.
Henry no estaba conmigo para mostrarme lo emocionante de la aventura y las novedades que podía aprender de este lugar.
Yo solo no podía ver la belleza del mundo que me rodeaba... necesitaba su ayuda.
La miré confundido por un instante y fruncí el entrecejo.*

-Todo... *Contesté simplemente. Me gustaba el mar, y todo lo que se pudiera hacer cerca de él ya fuera nadar, bucear, pescar, pasear o navegar...*

-De verdad? A mi me gusta también el mar, pero no lo puedo disfrutar tanto como tu

*No podia entrar en el por las mañanas y solo podia contemplarlo desde la playa, y por la noche aunque podia entrar solo podia nadar y nada mas. Ademas no me daba mucho tiempo teniendo que ayudar a Adriel en la clinica*

-Pero me gusta mas aprender cosas

*Le dije sincera, pero en lugar de continuar hablando con el empece a escuchar el sonido de algo golpear el mar constantemente, lo que me advirtio que venian ya a rescatarnos*

-Creo que veras pronto a tu hermano

*La mujer hablaba cosas extrañas. Cómo podía no disfrutar del mar si le gustaba? A menos que no supiera nadar, no sabía cómo podría tener limitaciónes en disfrutar algo que siempre estaba allí, en el mismo lugar.
La miré de reojo y luego volví a mirar el fuego.*

-Aprender cosas está bien.

*Henry siempre me estaba enseñando cosas, y siempre aprendía cosas nuevas allá a done íbamos.
Ahora, por ejemplo, estaba aprendiendo cómo se sentía estar abandonad y muerto de frío en una playa a oscuras en la noche, junto a una mujer que no paraba de parlotear y un hombre medio muerto que tenía no solo una pierna podrida, sino también su personalidad.
Presté atención al alcanzar a escuchar una disonancia lejana en el romper de las olas en la orilla de la playa y me levantéde la arena mirando hacia la oscuridad, aunque aún no podía ver nada más que el brillo anaranjado de una linterna en medio del negro que era la noche mar adentro.*

-Ya viene... mi hermano ya viene por mi ^^

*Por primera vez desde que había despertado, en mi rostro se dibujó una gran sonrisa mostrándome emocionado por la llegada de aquel bote.*